Hoy 31 de enero se celebra la fiesta de San Juan Bosco, el sacerdote italiano que, en 1859, fundó la Congregación Salesiana, que hoy está presente en 130 países. A lo largo de esta semana se están realizando actividades de todo tipo (culturales, religiosas, deportivas) en los colegios, parroquias, centros juveniles, que dirigen los salesianos para recordar a Don Bosco, que también es patrono de la Formación Profesional.
Pero este año estas celebraciones tienen un matiz solidario especial. En todas las obras salesianas se están llevando a cabo iniciativas destinadas a sensibilizar a los jóvenes y adultos sobre el problema de Haití y a recaudar fondos para ayudar en la reconstrucción de las obras educativas de Puerto Príncipe.
En 80 años de presencia en tierra haitiana, los salesianos han levantado 9 obras educativas en Puerto Príncipe y otras aéreas el país para atender a los jóvenes de la calle y dar educación y un futuro a muchos chicos y jóvenes. En el complejo salesiano de las “Ecole Nationale des Arts et Métiers” (ENAM), centro de acogida, escuela de formación profesional y escuelas elementales y de acogida de chicos de la calle, se atendían diariamente a 25.000 niños y jóvenes de los centros salesianos y los barrios cercanos, a los que se les ofrecía un desayuno, en un país extremamente pobre y malnutrido, con altas tasas de abandono escolar y explotación de los niños.
Después del terremoto, gran parte de las escuelas y obras Salesianas están destruidas. Quinientos niños, jóvenes y profesores fueron sepultados por los escombros en el ENAM. Ahora, por ejemplo, 3.500 personas que han perdido todo, están acogidas como refugiados en la obra salesiana Don Bosco en Carrefour Thorland, uno de los barrios de la capital haitiana.
Así, se está desbordando la imaginación de educadores y de los mismos jóvenes que, mediante chocolatadas, veladas solidarias, rifas, mercadillo solidarios, reuniones de sensibilización, colocación de huchas en las aulas, colectas especiales en las parroquias… están implicando a alumnos, padres y amigos de las obras salesianas para acudir en ayuda de los chicos y jóvenes de Haití.
Por Fco. javier Valiente
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